A lo largo de la Era de la Información, la tecnología ha mejorado todos los sectores, incluido el sanitario. Estas mejoras se han acelerado y multiplicado a medida que más organizaciones se dan cuenta de todos los beneficios de una estructura que da prioridad a lo digital.
Pero la atención sanitaria sigue siendo la mayor brecha que hay que cerrar y, aunque, al menos en este momento, un sistema "remote-first" no es la norma, en Rods&Cones vemos estos retos como oportunidades.
Protocolos de seguridad y apoyo reforzados
En un quirófano remoto, el cirujano principal nunca está sin apoyo. Al tener la oportunidad de contar con las partes interesadas del equipo de proveedores de tecnología médica, con especialistas expertos en implementación, así como con la guía quirúrgica principal según sea necesario, se disminuye el riesgo básico del quirófano y se proporciona una atención completa al paciente y al equipo médico.
Cuando los profesionales de otros sectores trabajan para rebajar la intensidad en torno a un tema de trabajo, suelen bromear: "No estamos haciendo una operación de corazón". En este caso, a menudo lo estamos (!). Acceder a la escalada en tiempo real es inviable sin una estructura "remote-first".
Mejora de la calidad general de la asistencia
Esto nos lleva a otra de las principales ventajas de un quirófano "remote-first": una mejor atención al paciente, independientemente de la distancia. Si mantenemos los intereses y la salud de los pacientes en el centro de nuestra decisión -y proporcionamos el mismo nivel de atención en cualquier momento y en cualquier lugar- está claro que la oportunidad de avanzar en los procedimientos y mejorar los estándares de atención existentes debería ser un factor clave en el cambio a un modelo de "remote-first".
Esto no sólo aumenta la seguridad a mitad del procedimiento, sino que también abre oportunidades de aprendizaje antes inaccesibles. Con el acceso a los comentarios en tiempo real y después de la operación, los médicos pueden seguir aprendiendo y desarrollándose en el trabajo. Y con una lente literal en el quirófano, los estudiantes pueden conocer los detalles de un procedimiento determinado de forma mucho más eficaz que aprendiendo de un libro de texto.
El cambio siempre resulta desalentador, y la preocupación por la seguridad de los pacientes debe seguir siendo una prioridad en todas las decisiones sanitarias. Sin embargo, las ventajas de un quirófano con mando a distancia están demostradas y, en última instancia, son las que más benefician al paciente.